La cartelera teatral de julio se renueva en un mes clave para la agenda de espectáculos atravesada por las vacaciones invernales. En ese contexto, una obra que regresa a Rosario es “El cumple de Gerardo”, creación del género realista escrita y dirigida por Leonardo Pérez que se podrá ver en la casa de Impulso para Mejorar (Avenida Pellegrini 540) con funciones los sábados 6, 13, 20 y domingo 28 de julio, siempre a las 20, con entrada a la gorra.

Con actuaciones de Mario Castellano, Gisel Edith Bolner, Jorgelina Paniagua, Iván Piñeyro y Jackeline Antonella Ailin Gómez, la trama parte de una aparentemente habitual y tranquila noche de celebración familiar en una casa del centro rosarino donde el grupo vuelve a reunirse para celebrar el cumpleaños del anfitrión. Pero la historia tendrá un giro inesperado –de la que el espectador será también parte fundamental- cuando comience a florecer la verdadera personalidad de cada integrante.

Sobre el surgimiento de esta obra, para Pérez “nace de una mirada hacia nuestra sociedad tratando de ver los conflictos que nuestros tiempos tienen que resolver y de qué forma: Ése es el plus que tienen las obras realistas, las obras que cuentan la historia del momento de los pueblos y civilizaciones, cómo resuelve la gente los conflictos que se van presentando”.

En ese sentido destacó que durante la trama se van sucediendo problemáticas “que vivimos todos hoy en día: encuentros y cruces, escenas que quedan puestas arriba de la mesa”, anticipó a La Tarima. Y destacó que con este trabajo “busca poner los temas sobre la mesa y debatirlos: No hay una bajada de línea. Los personajes tiene diferentes formas de pensar que exponen desde su lugar. Queremos mostrar cómo resuelven los conflictos”.

– La obra se presentó hace unos años y ahora vuelve renovada. ¿Cuál fue la experiencia y qué les motivo a volver a realizarla?

– Es el tercer año que se presenta, con un tercer elenco. Fue una muy linda experiencia en la cual ensayamos y entrenamos mucho. Con el primer elenco alcanzamos a hacer cinco funciones. La obra tiene un mensaje que creemos necesario que puedan ver todos los vecinos y vecinas mas allá de que son temas que tratamos todos los días. Tiene una mirada introspectiva para poder analizar de forma diferente los conflictos. Este año formamos un elenco nuevo y ya hicimos el proceso de entrenamiento y ensayo para salir al pre estreno y luego al estreno.

– Cada uno de los personajes tiene un trasfondo político muy marcado aún cuando no lo asumen como tal. ¿Qué mensaje buscas poner sobre la mesa y de qué temas querés hablar aquí?

– Cada personaje tiene un perfil y un problema político y social por resolver. Gerardo es el “hombre de la casa”, tiene la información un poco vieja. Para él, la vida correcta pasa por tener una profesión y tener las cosas ordenadas. Una de sus hijas es contadora como él pero tiene la lucha en la casa con sus otros hijos: uno es estudiante de teatro y fuma cannabis, y la hija es antiespecista y milita por los humedales. Él tiene una batalla con ellos en su casa. También está Cecilia que es la mujer de Gerardo que va conteniendo pero en el final se nota que también atraviesa un conflicto muy grande que nadie ve. Paula, la hija más grande y orgullo de su padre, tiene un conflicto que enfrenta sobre la identidad de género. Ella es lesbiana y está embarazada. Tiene que enfrentar a su padre por el tema de su sexualidad y el embarazo.

– ¿Qué te permite el género realista para una obra de estas características?

– Al ser un género realista nos permite poder hablar de los problemas y conflictos como también de las cosas buenas que le pasan a la sociedad y la evolución, poniendo un mojón en el presente podemos debatir sobre todas estas cuestiones.