Un nuevo paro general nacional contra el gobierno, encabezado por la CGT y con adhesión de las dos CTA, comenzó este jueves en la Argentina. Se trata del segundo de este tipo contra la política económica de Javier Milei.
En la ciudad hoy no hay colectivos. La UTA nacional comunicó que adhiere y que su disposición fue cortar el servicio desde la hora cero. Desde la delegación local definieron acompañar la medida. En tanto que los peones de taxis, y los titulares nucleados en ATI y Catiltar paran también, aunque algunos dueños de licencias salieron a trabajar.
En lo que respecta al sector estatal, tanto ATE como UPCN adhieren a la protesta, por lo que la administración pública nacional y provincial permanece cerrada. Lo mismo pasa con las dependencias municipales de Rosario, ya que el gremio también se plegó a la medida de fuerza.
Por el lado de AMSAFÉ y SADOP, también confirmaron que no hay clases el jueves. La decisión es para acompañar la protesta nacional y en continuidad del plan de lucha lanzado esta semana en rechazo del ofrecimiento salarial de la provincia, que afectó también el dictado de clases este miércoles, día en el que también hubo paro de estatales, médicos y municipales.
El sector de la sanidad también adhiere al paro general, por lo que el jueves no funcionan los centros de salud y solo se garantizan las guardias mínimas para urgencias en hospitales.
El gremio de los judiciales también participa del paro, aunque hay que señalar que está anunciada la realización de audiencias en Tribunales. Lo mismo ocurre con el Correo Argentino y con las oficinas de Aguas Santafesinas y de la Empresa Provincial de la Energía (EPE).
Por fuera del sector público, el paro general también tiene su impacto en el sector privado. La adhesión de bancarios, empleados de comercio y gastronómicos hace que la actividad comercial se vea muy restringida. Los bancos directamente no abren sus puertas, en tanto que los negocios, bares y restaurantes, al ser uno de los sectores de mayor informalidad, puede que en algunos casos funcionen con la atención de sus dueños y en otros casos lo hagan con trabajadores que no están sindicalizados por no estar registrados.
La construcción y el sector industrial tampoco están activos este jueves porque tanto UOCRA como UOM y SMATA definieron adherir a la jornada de huelga.
También se prevé una reducción en la cantidad de camiones que actualmente circulan por la región, ya que el Sindicato de Camioneros también anunció su adhesión al paro por lo que los vehículos que transitarán son los que conducen sus propios dueños.
Un gremio clave que se sumó a la medida de fuerza es el Sindicato de Estaciones de Servicios (SOESGPyLA), por lo que los surtidores de combustible de la ciudad están sin atención al público.
Por último, adhieren los trabajadores del peaje nucleados el SUTPA. Este sector levantará barreras desde las dos de la mañana de este 9 de mayo en autopista a Buenos Aires, Puente Rosario Victoria y rutas provinciales.