Colectivos feministas, organizaciones sociales, de estudiantes, sindicales y políticas y ciudadanos autoconvocados marcharon este martes por la tarde por las calles del microcentro rosarino rumbo a plaza San Martín, en lo que fue la décima manifestación bajo la consigna “Ni Una Menos” en rechazo a la violencia machista, denunciando los recortes presupuestarios por parte del gobierno nacional en políticas de género.

Los marchantes exhibieron una extensa pancarta con los nombres de las casi 3.000 de víctimas de femicidios, lesbicidios, travesticidios y transfemicidios. “Vivas, libres, sin miedo”, “que ser mujer no nos cueste la vida” y “si mañana no estoy quiero que griten por mí”, fueron algunas de las proclamas.

La primera marcha Ni Una Menos se realizó en junio de 2015, por el femicidio de Chiara Páez en la ciudad santafesina de Rufino, cuando la adolescente de 14 años fue asesinada por su novio y enterrada en el patio de la casa de su abuelo. El caso instaló la problemática del femicidio en las calles de todo el país y un generalizado pedido de políticas públicas para prevenir la violencia de género.

Según el último informe el Observatorio de las Violencias de Género, en este lapso de tiempo, en el país se registraron 2.827 femicidios, uno cada 31 horas, y en más de ocho de cada diez casos, el femicida pertenecía al círculo íntimo o era conocido de la víctima.